Sheila Irene: “El trabajo conjunto es fundamental para mantener la calidad y que lo proyectado se pueda instalar de manera más eficiente”
La construcción industrializada tiene un enorme potencial por sus innumerables beneficios en términos de calidad y eficiencia. Gracias a sus características tendrá una gran evolución en España ya que permitirá reducir los plazos de entrega y asegurar las máximas calidades para que todas las partes se vean favorecidas. Hemos tenido la oportunidad de dialogar con Sheila Irene Parreño, arquitecta técnica en Porcelanosa Offsite, la línea de negocio de BUTECH para el diseño, producción e instalación de módulos industrializados como baños, cocinas y fachadas. Ella nos describe el momento que atraviesa la construcción modular y cuáles son todas las ventajas que ofrece frente al modelo tradicional. Además, comenta que la colaboración entre empresas será una garantía de calidad y cómo este modelo favorece la inclusión de la mujer en un sector en el que los hombres siempre han estado más presentes.
Origen de la construcción modular
La forma moderna de la construcción modular surgió en el siglo XX. La necesidad de construir rápidamente viviendas temporales y estructuras militares impulsó el desarrollo de métodos prefabricados tras la Primera y Segunda Guerra Mundial. Tras la destrucción que dejó atrás estos conflictos bélicos hizo que la construcción modular fuese una alternativa rápida para dar una solución habitacional a todos aquellos que lo perdieron todo. A medida que en la segunda mitad del siglo XX la tecnología se fue desarrollando, la construcción industrializada se benefició de los avances en diseño y fabricación permitiendo una mayor precisión y eficiencia en la producción de componentes modulares. Hoy en día, las fachadas y los baños son las partes que más evolución han presentado, mientras que las cocinas es el próximo reto que afrontará la construcción industrializada en los próximos años.
Abriendo un camino hacia el futuro
La construcción industrializada está en camino de revolucionar el sector de la edificación. Al estandarizar procesos y utilizar tecnologías avanzadas, se consigue minimizar los errores. Además, esta metodología promueve la optimización de recursos y la reducción de residuos, lo que resulta en proyectos más económicos y respetuosos con el medio ambiente. Esta transformación, al igual que permite optimizar los recursos, mejora la calidad de las edificaciones y abre nuevas posibilidades de diseño y flexibilidad en la ejecución de proyectos. La construcción industrializada será fundamental para la evolución del sector, aunque ya se está abriendo un hueco dentro del paradigma actual. “Pese a que en otros países esta forma de edificación está más avanzada, en España hay mucho potencial para llevarla a cabo”. Sin embargo, pese a que muchos lo vean como el futuro, este tipo de construcción está ganando adeptos en el presente. Cada vez más empresas están optando por realizar baños, cocinas y fachadas industrializadas, ya que tiene cuantiosos beneficios para su producción y permiten mejorar las condiciones laborales de los obreros debido a que gran parte del trabajo que realizan se hace en una fábrica. “Se trata de una tendencia que está creciendo exponencialmente en la que los promotores, constructores y proveedores establecen nuevas vías de colaboración para ganar en eficiencia y en sostenibilidad”, explica Sheila Irene. La construcción modular está experimentando un crecimiento significativo gracias a su capacidad de ofrecer soluciones rápidas, económicas y sostenibles para las múltiples necesidades que tienen las empresas de construcción hoy en día.
Un sector en constante evolución
La construcción es un ámbito dinámico que experimenta una constante evolución impulsada por diversos factores y que ha sabido adaptarse a los cambios tecnológicos, sociales y ambientales para seguir creciendo. En los últimos años se ha beneficiado de avances tecnológicos como la implantación de la robótica o la impresión 3D para transformar los métodos de construcción permitiendo, a su vez, una mayor eficiencia y precisión en todos los procesos de una obra. Además, la innovación está a la orden del día desarrollando nuevos materiales de construcción más resistentes, ligeros y sostenibles para levantar edificios más duraderos. La digitalización también está ayudando a dar un nuevo enfoque a un área anclada siempre en la tradición. La utilización de herramientas como los softwares de gestión de proyectos están permitiendo una planificación más precisa, reducir los tiempos establecidos en la construcción y una mayor colaboración entre los equipos. Asimismo, uno de los mayores cambios que está afrontando la industria es dar pasos hacia la sostenibilidad y la responsabilidad social. Las empresas, cada vez más, están atendiendo las demandas institucionales, como los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU, y las peticiones de las personas de avanzar hacia la construcción de edificios energéticamente eficientes y respetuosos con el medio ambiente. Por otro lado, la atención a la inclusividad y la diversidad también está aumentado permitiendo crear entornos de trabajo equitativos y seguros para todos aquellos trabajadores que están cualificados para aportar su granito de arena.
La sostenibilidad y la innovación como punta de lanza
Llevar a cabo políticas para preservar el medio ambiente en el sector de la construcción es esencial para mitigar el impacto negativo que su actividad tiene sobre nuestro planeta. Todos los pasos dados hacia la sostenibilidad contribuyen a la reducción de la huella de carbono y la preservación de nuestros recursos naturales. Las prácticas sostenibles en la construcción generan ahorros a largo plazo en los costes operativos y de mantenimiento. Integrar la sostenibilidad ambiental en la industria de la construcción no solo es una responsabilidad que todas las empresas deberían tener consigo misma, sino también una oportunidad para impulsar la innovación. Los sistemas industrializados, como los baños construidos para la residencia de personas mayores de Mare de Deu de la Salut, en la que Núñez i Navarro se ha hecho responsable de diseñar el proyecto y de su construcción permiten asegurar “un mayor control tanto a nivel de consumo como a nivel de residuos”. Los baños industrializados son, de inicio, “más sostenibles gracias a una precisa planificación de los trabajos en la línea de producción, un menor consumo de materias primas, una reducción en el transporte minimizando, de esta manera, la huella de carbono y una gestión más responsable de los restos de obra con un control específico de los residuos generados durante el proceso de producción”. Una demostración de como la sostenibilidad tiene y debe ir de la mano de la innovación en aras de la eficiencia.
Un importante ahorro de tiempo y costes
Minimizar los plazos de entrega supone una enorme ventaja competitiva y permite garantizar la eficiencia y la rentabilidad de los proyectos. La capacidad de cumplir con los plazos de entrega establecidos no solo mejora la satisfacción del cliente, sino que también reduce los costes asociados a retrasos en los plazos de espera. Además, un proceso de construcción ágil y bien planificado permite aprovechar mejor los recursos disponibles y minimizar el impacto en el medio ambiente. Ahorrar tiempo en la construcción no solo es una cuestión de eficiencia operativa, sino también de éxito empresarial y desarrollo sostenible. “Las múltiples visitas que se realizaron a la obra de la residencia de la calle Mare de Deu de la Salut han permitido que la implementación de los baños se realice de la manera más eficiente y rápida posible, sin ninguna complicación añadida. La colaboración entre Porcelanosa Offsite y Núñez i Navarro fue fundamental desde el inicio del proyecto para poder acortar al máximo los tiempos de implementación”, asegura Sheila.
La colaboración entre empresas, garantía de calidad
El trabajo colectivo y la compenetración con Porcelanosa Offsite en la residencia de la calle Mare de Deu de la Salut ha permitido evitar riesgos obteniendo un resultado de máxima calidad para todos los baños, ya que con pocas tipologías se ha podido cubrir todos los proyectados, minimizando los errores derivados típicos de la construcción. Esta colaboración se realizó “conjuntamente desde el inicio y durante todo el desarrollo del mismo para llevar a cabo una gestión integral desde el departamento técnico de ambas empresas para conseguir que la implantación en obra sea un éxito”, manifiesta Sheila. Para cumplir estos estándares, antes de empezar con la producción para adaptar las necesidades a nivel de acabados, distribución interior y requerimientos técnicos, se llevó a cabo un piloto. “El trabajo conjunto es fundamental para mantener las exigencias de uso y calidad y que lo proyectado se pueda fabricar e instalar en obra de manera más eficiente. Para ello, se realiza una reproducción a tamaño real antes de empezar con la producción y, de la misma manera, se realizan visitas a la obra”.
La inclusividad, al alza en la construcción industrializada
Al igual que este tipo de obra ha permitido cambiar la sostenibilidad y la eficiencia, también lo ha hecho con el número de mujeres presentes en el sector mejorando, de esta manera, la inclusividad en un área que ha carecido tradicionalmente de presencia femenina. Según el informe ‘Mujeres en el sector de la Construcción 2023’ realizado por la Fundación Laboral de la Construcción, aclara que las mujeres han alcanzado el 11,2 % de representación laboral en el sector tras haber sumado 7.500 trabajadoras el año pasado, una cifra que supera el máximo histórico registrado en el año 2015. “Cada día, somos más mujeres trabajando en puestos de responsabilidad, como arquitectas”. La inclusividad en el sector de la construcción es esencial para crear un ambiente de trabajo accesible con el objetivo de fomentar la igualdad y la innovación en la industria. “La edificación siempre ha sido un trabajo muy masculinizado, pero, dado que todo el proceso de producción se realiza dentro de una fábrica y con un desarrollo mucho más controlado, facilita la incorporación de más mujeres y contribuye a conseguir una mayor igualdad entre ambos géneros”, finalizó Sheila. Sin embargo, pese a que la presencia de la mujer en el sector de la construcción aumenta a medida que pasa los años, el porcentaje en comparación con los hombres sigue siendo bastante bajo en comparación con otros sectores. Su participación en el sector es crucial para el progreso de la industria, ya que, de esta manera, se puede aprovechar al máximo el talento y el potencial de todas las personas, independientemente de su género.
Un proyecto pionero
La residencia para mayores de la calle Mare de Deu de la Salut ha sido nuestro proyecto piloto en el que la reducción de plazos era lo primordial. La colaboración con Porcelanosa Offsite ha sido todo un acierto, ya que es un partner que aporta una gran seguridad, profesionalidad y experiencia dentro del sector de la construcción. Con ellos, se ha llevado a cabo en diversas tipologías, la construcción de 100 Monobaths, todos los baños del edificio, permitiendo cumplir con los plazos marcados y una reducción de residuos en obra. Además, la construcción modular, gracias a la especialización de los obreros en la fábrica, ha asegurado que todos los acabados cumplan con los estándares de calidades marcados para este proyecto.
