Laia López: “Barcelona es una ciudad con mucho arte, pero se tendría que valorar más el arte urbano”
Exigente, perfeccionista, persistente y sensible. Con estas palabras se define a sí misma la ilustradora barcelonesa Laia López. Graduada en bellas artes y con un estilo artístico muy personal que ha desarrollado de manera autodidacta, la autora de obras tan reconocidas como Strawberry Moon. La hija de la luna, la bilogía Moon o la serie Sara y las goleadoras, arrasa por todo el mundo. Su proyección en las redes sociales crece a un ritmo vertiginoso y ya supera el millón de seguidores en Instagram, gracias a su indiscutible talento para la ilustración y el diseño de personajes.
Tal como os anunciamos hace algunas semanas, la artista se ha sumado al proyecto NNWallery para llenar de su arte los más de 30 metros de muro de obra de la calle Providència, 168. Y hoy, descubrimos una nueva Barcelona de fantasía a través de sus ojos
-Te graduaste en Bellas Artes y te has especializado en el mundo de la ilustración y el diseño de personajes, en el que has desarrollado tu propio estilo artístico de forma autodidacta, explícanos, ¿cómo fue ese proceso de autoaprendizaje? ¿Cómo defines tu estilo?
Pues ese proceso, de hecho, aún no ha terminado, sigo aprendiendo y creciendo cada día y aún me queda muchísimo por mejorar ¡y aprender cosas y técnicas nuevas! Yo empecé observando cómo trabajan los artistas a los que admiro, viendo sus obras, sus procesos en el arte digital, qué consejos daban, que truquillos les funcionaban a ellos, etc.…
Copiando, observando y dibujando mucho es como he ido yo poco a poco trabajando mi estilo. No nacemos sabiendo dibujar, todos hemos empezado desde cero, cuando digo que recomiendo copiar, me refiero a que es algo que puede ayudar a que una persona que está empezando en el dibujo, encuentre por dónde tirar con su estilo y ver con qué se siente cómoda dibujando, copiando ciertas características de otros artistas y estudiándolas/copiándolas para luego traducirlas/adaptarlas en su arte y en su propio estilo.
Otra cosa muy distinta es copiar el dibujo de otro artista, subirlo a redes sociales y decir que el mérito es tuyo, es cierto que lo has dibujado tú, pero lo correcto es dar crédito al artista al que has copiado. También es muy importante, si vas a compartir tu proceso de aprendizaje basado en la obra de otra persona, ¡pedir permiso al artista para hacerlo!
-¿Dónde o cuándo suele encontrar Laia López la inspiración para crear sus obras?
Es algo muy aleatorio. Digamos que me tiene que venir “la inspiración divina”, realmente es muy poco práctico guiarme de esta forma o tener que esperarme a que de repente me venga una idea que me inspire a hacer algo, pero hasta que no tengo muy clara la idea de lo que quiero hacer y cómo quiero que me salga, sé que no va a salir bien.
Con Strawberry Moon, por ejemplo, fue un proyecto que me propusieron hacer desde cero (yo no tenía en su momento ninguna idea en mente). Me propusieron publicar algo que fuese mío al 100%, hasta ahora sólo había ilustrado obras de otros autores. Le di muchísimas vueltas, la historia cambió de rumbo un par o tres de veces porque no lograba cerrarla, me alargaba tanto que Strawberry Moon podrían haber sido 5 libros fácilmente.
Quería que fuese una historia breve y sencilla, en la que yo disfrutase de su creación, que fuese ese tipo de historia que te hace sentir bien y relajada cuando la lees.
-Para una artista de la ilustración, ¿cómo ha sido la experiencia de participar en un proyecto de Urban Art como NN Wallery?
Ha sido un proyecto muy diferente a lo que suelo hacer, ¡sí! Y la verdad, estoy súper encantada con el resultado, ¡Berokone ha hecho un trabajazo y he ido viendo lo que ha hecho con otros artistas y es una pasada!
Por mi parte, sí que me costó un poco hacer el diseño al principio, no estoy acostumbrada a trabajar con piezas de tan gran tamaño, y debía tener en cuenta que las distintas escenas que quería dibujar, de algún modo tenían que estar enlazadas entre ellas. Fue todo un reto, pero la verdad es que no me importaría repetir y hacer algo parecido una vez más.
-En el mural de Providència, 168 has proyectado un conjunto que a su vez encierra varias escenas distintas, cuéntanos qué podemos encontrar.
Quise representar mis rincones favoritos de Barcelona. Podéis encontrar el skate park de la playa de la Marbella, el “trencadís” de colores que decora la entrada de la Boqueria con sus clásicos vasitos de frutas, una de las calles del barrio gótico, las vistas a Collserola que suelo ver desde mi casa, el escaparate de la pastelería Escribà con sus pastas y tartas y un trocito del Parc Güell.
-Has creado un mix de lugares de Barcelona que para ti son representativos de la ciudad junto con los personajes de dibujos animados que marcaron tu infancia.
Sé que mi generación vivimos mucho los dibujos animados que solían dar en el K3/3XL. Y es algo que marcó mucho mi infancia y muchos de ellos me recuerdan a mi ciudad, por lo que quise representarlos de alguna forma dentro de los lugares que escogí. Hice una versión “genderbend” de Petri del Súper3, el personaje era un chico, pero a mí me hacía ilusión cambiarlo un poco y darle mi toque personal, siendo de todos modos fiel al diseño original del traje y los accesorios. También aparecen “les 3 bessones” en la pastelería Escribà y el “Tomàtic” encima del hombro de la brujita que sobrevuela el barri Gòtic. También uno de los chicos que sale en el skate park que está de espaldas es otro personaje original mío, el que lleva “MR” en la camiseta, es Mako Rekin, que sale en mi novela ilustrada “Strawberry Moon”.
- ¿Quién es la brujita?
¡Otro personaje original! Se llama Kat, tengo otros 4 personajes como ella a que las llamo “Royalty Witches”, me hacía ilusión dibujarla a ella. Por ahora no puedo decir mucho más sobre su historia (podría decirse que estoy trabajando en ello) y ojalá pronto pueda contar un poquito más sobre su mundo.
-A través del proyecto de urban art NN Wallery, el Grupo Núñez i Navarro busca mejorar el entorno de las personas, ¿crees que se cumple la misión?
¡Yo creo que sí! La cosa cambia mucho cuando caminas por una calle y lo que tienes al lado es un muro de cimiento gris. Ver obras así con un objetivo, una estética y una paleta de colores que es agradable y sencilla pues llama la atención. Y más siendo un mural tan largo, hace que realmente te pares a observarlo y a analizar cada esquina del muro.
- Y a ti personalmente, ¿qué te ha aportado el proyecto?
Pues me ha hecho mucha ilusión saber que una obra mía está plasmada en mi ciudad. Poder poner mi granito de arena para que Barcelona sea más bonita de lo que ya es me ha parecido una oportunidad muy bonita.
- ¿Ha cambiado tu percepción del urban art? ¿Repetirías?
¡Definitivamente repetiría! Es un reto porqué realmente has de tener en cuenta muchas cosas, lo que estoy dibujando luego va a tener que proyectarse en un muro, la persona que lo haga va a tener que recrear mi estilo, intentar facilitar el trabajo del muralista un poco dentro de lo que cabe. Nunca he hecho urban art o trabajado con sprays, realmente admiro mucho la gente que hace este tipo de obras y me gustaría probarlo yo misma algún día.
- Los muros de obra de NN Wallery son un proyecto efímero, permanecen el tiempo que permanezca la obra en construcción. ¿Cómo vives esa temporalidad?
Me da un poquito de pena y tristeza ahora que lo pienso, pero creo que es porque no estoy acostumbrada a formar parte/trabajar en este tipo de arte. Trabajo casi siempre en digital, y podría decirse que es totalmente lo contrario al arte urbano, el arte digital siempre va a estar presente y vivo mientras esté viva la tecnología. Por eso se me hace raro pensar que un día de estos el muro ya no estará. Pero por otra parte creo que también es parte del encanto y la gracia del arte urbano.
- ¿Qué significa Barcelona para ti? ¿Cómo la definirías?
Barcelona para mí es mi hogar. He viajado a varios países durante semanas e incluso meses y cuando ya pasa un tiempo que estoy fuera, siempre acabo pensando “echo de menos Barcelona” mi familia, las calles, la comida, los paseos por la playa… Es una ciudad que tiene sus sitios de tranquilidad y calma, otros llenos de fiesta y vida, con mucha luz y gente de alrededor del mundo.
- ¿Crees que a Barcelona le falta “arte” en sus calles?
Creo que Barcelona de por sí es una ciudad con mucho arte, pero creo que se tendría que valorar mucho más el arte urbano y el arte en general. Por eso creo que esta iniciativa es una idea fantástica para poder dar a conocer un poco a muchos artistas y sus obras y que las calles de Barcelona se llenen de color.
- Y, por último, ¿qué proyectos tienes ahora entre manos?
Ahora mismo estoy trabajando en algo que aún no puedo anunciar ni comentar mucho al respecto, pero puedo decir que podré este año…Podría decir… que hay mucha magia y “royals” involucradas.
Te invitamos a descubrir la nueva sección NN Wallery en nuestra web en la que encontrarás todas las obras que forman parte del proyecto de urban art impulsado por el Grupo Núñez i Navarro, en colaboración con Norma Editorial. Te mostramos cómo cada uno de los artistas participantes ha transformado los muros de obra en espectaculares murales que reflejan su propia visión de lo que Barcelona les inspira. Porque los muros de obra ya no volverán a ser lo que eran. Ahora son auténticas obras de arte.